YOGA EN TIEMPOS DE PANDEMIA.
El mes de Marzo, recién pasado, escuchamos,
vimos, leímos acerca del “Coronavirus” (COVID-19) en todos los medios de
comunicación; televisión, radio, periódicos e inclusive en las redes sociales.
Ha sido más que abundante la cobertura y con perspectiva de que en el mes de
Abril se continúe escuchando, viendo y leyendo del tema tanto o más que el mes
anterior.
El Coronavirus
fue considerado por la Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) como “Pandemia
Global”.
Según la
R.A.E.[1] significa “Enfermedad epidémica“; enfermedad que se propaga durante
algún tiempo, acometiendo simultáneamente a gran número de personas de un país
o región, de forma intensa e indiscriminada y que en este caso es global. Este
virus, de crecimiento exponencial, se ha extendido y continúa extendiéndose a
muchos países, pasando de un hemisferio a otro. Una situación mundial que no tiene
comparación de algo visto o vivido anteriormente; tal vez podría recordarnos la
peste bubónica (guardando las proporciones de tiempo, población, alcance, tipo
de enfermedad, recursos médicos y mortalidad).
Esta
enfermedad epidémica nos ha sacado de nuestra actividad cotidiana, nuestra zona
de confort y más aun está rompiendo nuestros esquemas. Ha modificado y seguirá
modificando las economías de un gran número de países y además, de forma
drástica. También muchas personas han tenido que adaptarse rápidamente a la
situación para poder subsistir económicamente; otros han perdido su fuente
laboral. Un número preocupante de personas ha tenido que cerrar su mediana,
pequeña, micro empresa o negocio, aumentando el número de trabajadores cesantes
por despido.
Sin duda,
esta epidemia nos ha obligado a modificar nuestra forma de trabajo, de
estudiar, de comprar lo cotidiano, en definitiva ha roto nuestra estructura de
vida y nos está enseñando una nueva manera de vivir.
La forma
tradicional de trabajar; presencia física en el puesto de trabajo, ha sido
modificada. Se están utilizando los medios disponibles como el Internet,
aplicaciones de conferencia en línea y otras para trabajar desde la distancia
para así evitar nuevos contagios.
Se han
cerrado Escuelas, Jardines Infantiles y
Universidades, para evitar la propagación del virus, comenzando, talvez, la
potenciación de la educación “Online”.
Obligatoria
y rápidamente se ha tenido que coordinar tanto el trabajo de aula como administrativo
vía online. También aquí, como en todo trabajo formal, la presencia física en
el puesto de trabajo ha dejado de estar en la sala de clases u oficinas
administrativas, las planificaciones, control y evaluación de estudios se ha realizado
por internet utilizando las aplicaciones
disponibles para tal efecto.
El área de
la Salud Pública se ha visto desbordada en su capacidad de atención quedando en
evidencia que en el transcurso del tiempo se ha potenciado y privilegiado la
“Salud Privada” (con su rol comercial) por sobre la “Salud Pública” (con su rol
social y humano). También las/los profesionales y técnicas/técnicos de la salud
han sido superados en su resistencia y capacidad de atención de enfermos
provocando un agotamiento y estrés en los equipos de salud.
Junto con
todo lo anterior, hemos sido
bombardeados con noticias sobre el tema todos los días y a cada hora, a tal
punto que la televisión ha pasado de ser un medio para mantenernos informados a
ser un medio audio-visual casi tóxico, dañino para nuestra salud mental;
creando temor, angustia, depresión, incertidumbre y estrés en algunos casos.
¿QUÉ SE PUEDE HACER ANTE ESTAS CIRCUNSTANCIAS?
Solo debes mantenerte.
Mantente
(no te desmorones) y sé tú la sostenedora o el sostenedor de los tuyos en estos
momentos de vicisitudes e incertidumbre.
Es un momento de “stand-by”, estamos en modo de espera o reposo obligado.
No se puede hacer mucho.
Trata de
evitar que el estrés, el temor, el miedo, la angustia se apodere de ti, pues si te afecta, los
tuyos, tu familia, pueden sentir lo que te sucede afectándoles a ellos también.
Mantén la
atención y enfoca tu concentración, con toda la fuerza de tu ser, en sobrepasar
esta situación.
¿CÓMO LO PUEDO HACER?
Mantenerse quieta/quieto,
aclarar la mente, enfocarse en pensamientos de forma efectiva, clara y asertiva
para quien no tiene costumbre de dedicarle un tiempo al descanso mental puede
resultar casi imposible, pero especialmente ante situaciones extremas como la
que estamos viviendo es necesaria la predisposición para adquirir la costumbre y
poder lograrlo.
El yoga, te
puede ofrecer herramientas que pueden mejorar tu salud, fortalecer tu mente y en
especial tu sistema nervioso para enfrentar de mejor manera situaciones como
esta. Ahora es momento de conocerlo, saber en qué consiste y de comenzar a
practicarlo.
A
continuación te dejo algunos links para que vayas conociendo el Yoga, visítalos
y descubre sus beneficios junto a tus hijas, hijos y familia.
Que tengas tranquilidad y salud.
Sat Nam, 🙏
Randeep Singh
[1] R.A.E.: Real Academia Española (Real Academia de la
Lengua Española).
▪ Pandemia.
1. f. Med. Enfermedad epidémica
que se extiende a muchos países o que ataca a casi todos los individuos de una
localidad o región.
▪ Epidemia
Del lat. mediev. epidemia, y este del gr. ἐπιδημία epidēmía;
propiamente 'estancia en una población'.
1. f. Enfermedad que se propaga durante algún tiempo por un
país, acometiendo simultáneamente a gran número de personas.
2. f. Mal o daño que se expande de forma intensa e
indiscriminada.
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●
FUENTE:
► La OMS considera que brote de
coronavirus califica como una pandemia global – MINSAL –Chile.
► Manual Primer Nivel
Capacitación Internacional de Maestros de Kundalini Yoga - KRI. 2007, Yogui
Bhajan.
